Actualmente, el puesto de entrenador personal se ha convertido en uno de los perfiles profesionales más solicitados, y no únicamente por deportistas profesionales, celebridades o personas que tengan un poder adquisitivo alto, sino también de forma general para aquellas personas que practican deportes como ocio, principiantes y hasta personas experimentadas en el mundo de la actividad física.
El objetivo del entrenamiento personal suele estar en la personalización al cliente, y suelen ir desde mejorar la práctica deportiva, hasta la realización de esta para adelgazar o conseguir un estado de forma mucho más atlético. Incluso, el entrenamiento coordinado por una persona capacitada puede estar ligado a la rehabilitación de una lesión.
¿Quién es un entrenador personal?
Se puede definir como un experto en el mundo del fitness que, también, está capacitado en la actividad deportiva. Así, podrá recomendar ejercicios, motivar y fijar objetivos concretos y dirigidos al individuo, en función de sus condiciones físicas y propósitos.
El entrenamiento personal está considerado por la ACE (American Council on Exercise) como uno de los mejores servicios de actividad física en este siglo. Su gran éxito se debe a la satisfacción y los beneficios que produce brindar una atención personalizada; pero también a que este profesional es una importante pieza para mejorar la gestión de centros deportivos y sus resultados económicos de manera considerable.
Su deber es poner a disposición todos los recursos, tiempo y tecnología necesarios para conseguir resultados con rapidez, seguridad y eficacia. Asimismo, diseñar un plan que producirá una evolución de la condición física, capacidad respiratoria, cardíaca y estado general de salud.
Diversos estudios han demostrado que este tipo de especialistas mejora la eficacia que ejercitarse de forma libre, especialmente en el caso de las mujeres. Además, contar con el asesoramiento de este profesional te ahorra invertir tiempo en ejercicios que no ayuden a cumplir tus metas o a realizarlos de una manera incorrecta.
¿Qué tomar en cuenta antes de contratar un entrenador personal?
Debido a la creciente oferta que existe, lo más importante es considerar los siguientes puntos antes de tomar la decisión:
- Formación académica. Los conocimientos que tenga el entrenador son imprescindibles para que sus decisiones estén basadas en razones de peso.
- Experiencia. La experiencia en situaciones similares a la de uno mismo ayudará a que haya un mayor interés para elegir al más calificado y que se adapte mejor a ti.
- Servicio ofrecido. Se debe valorar aspectos como la relación calidad-precio, el tiempo que te podrá dedicar y los instrumentos que tenga a la mano.
- Horario disponible. Si se desea trabajar en los horarios disponibles, y estos suelen ser variables, el entrenador personal que no tenga la disponibilidad para adaptarse a ello o tenga un horario fijo de manera constante puede ser un inconveniente.
Ventajas de tener un entrenador personal
Tomando todas las consideraciones, al invertir en una atención de estas características se está tomando una excelente decisión, ya que se encargará de planificar el asesoramiento necesario para alcanzar tus metas. No obstante, también tiene otros beneficios.
- Alimentación personalizada
Siempre se debe partir por revisar la dieta que se seguirá habitualmente. Esta tendrá que ser analizada y adaptada para alcanzar con seguridad los objetivos previstos.
No sirve solamente ejercitarse al límite de las capacidades si la dieta no es la adecuada para el propósito trazado. Entre las ventajas destaca que se encargará de que el organismo cuente con los nutrientes necesarios para satisfacer sus necesidades. También recomendará qué cantidades se necesita comer para mantener un estado de salud estable.
- Rutina de ejercicios personalizada
Al llevar mucho tiempo siendo constante y realizando una serie de ejercicios concretos se llegará a un punto de estancamiento. Esto es algo que, pese al buen nivel físico, no se visualice mejoría, y lleguemos a perder el camino por completo.
En este punto, es posible presentar una sensación de haber llegado al límite, pero todavía se tiene mucho margen para explotar. La solución, en la mayoría de casos, es realizar un cambio en la rutina de entrenamiento con diferentes sistemas y posiblemente llevar a cabo cambios en la alimentación.
Asimismo, es posible que haya que corregir ciertos errores para poder superar este período. El entrenador personal será el encargado de evitar todo esto, pues en la planificación inicial para conseguir los objetivos ya se toma en cuenta estos escenarios.
- Motivación
La falta de fuerza de voluntad es la principal razón por la que la mayoría de las personas fracasan cuando se inscriben en un centro deportivo. Este problema es más común con los principiantes, pues no suelen tener establecida una rutina. Por esta razón, se les suele recomendar el asesoramiento de un profesional de este tipo.
Los profesionales certificados pueden diseñar una estructura adecuada para desarrollar una forma física y mental que permita mejorar el rendimiento y favorecer la salud general. Su apoyo continuo dará más confianza y ayudará a comprender cada uno de los ejercicios que se realizan.
Además, otra de las ventajas indiscutibles de contar con un entrenador personal es que aporta un mayor dinamismo y regularidad en las sesiones. Su cordialidad, presencia y ánimo transmitirá el sentimiento de apoyo necesario para superar los propios límites y te ayudará a mantener una buena motivación durante todas las sesiones de ejercicio.
- Evitar lesiones
Una lesión es el detonante perfecto para estancarse y se pierda parte del progreso realizado a nivel deportivo hasta ese momento. Como consecuencia, es posible que cueste más obtener resultados favorables.
Por ello, otra de las ventajas de tener un entrenador personal es que estará pendiente de forma permanente en que esto no suceda. Su experiencia y conocimiento le permiten prever las malas ejecuciones de las técnicas de los ejercicios diseñados y enseñarán cómo se deben realizar con seguridad.
Asimismo, tendrá que dedicar el tiempo que necesitemos para que aprendamos la técnica adecuada de cada ejercicio, lo que mejorará los resultados y evitará lesiones. Por otro lado, se encargará de vigilar constantemente la postura para que la realización de los ejercicios sean seguros.
- Resultados según objetivo
Cuando se tiene el apoyo de un entrenador personal vamos a obtener grandes resultados. Por tanto, conseguiremos la mayor eficacia posible proporcional al tiempo invertido en cada sesión.
Para obtenerlos, los objetivos deben ser concretos. Además, se debe tener presente que las rutinas prefabricadas no nos van a ayudar tanto como un plan adaptado a las necesidades propias.
Para diseñar un buen plan que cumpla con las metas pactadas no solo debe conocerse los músculos que se trabajan en cada ejercicio. También hay que valorar las necesidades que se tienen y cómo se deben adaptar el entrenamiento al estilo de vida de cada uno. Por ello, un profesional marcará la diferencia para conseguirlos.
Conclusión
Sin duda, el entrenador personal logra que se pueda dar el máximo desempeño. En muy poco tiempo se obtendrá un rendimiento óptimo con el que se reduzca el peso, se logre aumentar la masa muscular, mejoré el estado físico y, por ende, también el estado mental.
Un buen profesional te ayudará a mejorar tu salud de forma general. Así como también el rendimiento académico y laboral se verán optimizados. Por eso, aunque no se cuente con mucho tiempo y los recursos sean limitados, contar con este soporte a medio y largo plazo, es todo ventajas.